Comer bien es uno de los mejores regalos que puedes darte. Aquellos que logran conseguir un balance de alimentos tendrás más energía, una mejor salud física y mental e, incluso, una mayor estabilidad económica; esto último se debe a que los gastos médicos serán mucho menores.
Una gran cantidad de personas creen que para tener una buena alimentación lo único importante es comer verduras y frutas, pero esto no es cierto. Comer bien significa conseguir un balance entre carnes magras, huevos, verduras, frutas, granos y productos lácteos. También significa eliminar de nuestra dieta productos que puedan ser perjudiciales o, en su defecto, rebajar su consumo a lo mínimo.
A continuación te diremos algunos beneficios de una dieta saludable, esperamos que te animes a cambiar tu hábitos alimenticios.
Mayor productividad
Debido a una buena alimentación tu cerebro tendrá el mejor combustible posible para que funcione de la mejor manera. Te recomendamos que averigües sobre los alimentos que son más beneficiosos para este fin, por ejemplo los pescados grasos o las verduras de hoja verde, las cuales puede prevenir enfermedades como el Alzheimer y la demencia.
Mayor felicidad
Somos lo que comemos, esa es una gran verdad. Comer alimentos saludables afecta directamente a nuestro cerebro y, por ende, a la sensación de felicidad que tengamos. Alimentarse con plátanos y chocolate negro en pequeñas cantidades pueden reforzar tu estado de ánimo. La clave en esto este asunto es comer a conciencia, sabiendo muy bien lo que estamos consumiendo y permitiéndonos disfrutar.
Escoge alimentos ricos en vitaminas y minerales, en esto las frutas serán estupendas, igual que los granos enteros y las verduras que su consumos se asocia a un menor riesgo de padecer depresión. Además puedes comer alimentos ricos en grasas omega-3, como frutos o salmón.
Menos estrés
El estrés es uno de los mayores males que existen en la actualidad. Miles de personas, alrededor del mundo, sufren de él. Sin embargo, muy pocos lo asocian a la alimentación. Al contrario de la idea común, lo que comemos puede influir directamente en los niveles de estrés con los que contemos.
Alimentos saludables, ricos en proteínas pueden llegar a modelar los niveles de cortisol en nuestro cuerpo. Algunos estudios demostraron que consumir ácidos grasos omega-3 y magnesio ayuda a reducir los niveles de cortisol. Te recomendamos una dieta rica en proteínas, donde el pescado y los productos lácteos sean siempre los protagonistas.
Ahorras dinero
Al tener una buena alimentación, las dolencias y los dolores serán muchos menos, esto hará que las cuentas médicas sean pocas y que tu dinero te rinda lo suficiente. De la misma manera, si tu alimentación no es saludable llegarán males como la obesidad, lo que hará que te enfrentes a muchos problemas físicos y tengas que invertir para contrarrestarlos. Cuidando tu salud por medio de la alimentación también cuidarás el bolsillo.
Más salud
Aunque ya lo hemos dicho a través de todo el texto, comer bien hará que tengas una muy buena salud. Las enfermedades crónicas como el cáncer, la diabetes, obesidad y los padecimientos del corazón son fácilmente prevenibles con una buena alimentación.
Otros beneficios de una dieta saludable
Confianza
Las dietas saludables le darán la energía para pasar el día y pueden hacer que se sienta mejor físicamente, dándole confianza en su cuerpo.
Longevidad
Vivir una vida larga y saludable no es una garantía, pero la calidad de vida puede mejorarse con una dieta que mantenga el corazón, los órganos y el cerebro en perfecta forma.
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